Para participar en las competencias automovilísticas de la categoría del Grupo 5 de la FIA, Porsche creó una versión derivada del famoso automóvil de calle Porsche 911 turbo y equipada con soluciones específicas de motor y chasis. Se desarrollaron varias versiones para competiciones deportivas. Particularmente famoso fue el Porsche 935J “Baby” construido para competir en el campeonato nacional alemán (Deutsche Rennwagen Meisterschaft) en la categoría de dos litros. El "Baby" adoptó un chasis aligerado que permitía que el auto tuviera un peso total de solo 735 kg para estar en línea con la normativa. Adoptó un motor de 1.425 cc refrigerado por aire capaz de entregar una potencia de 261 Kw El coche obtuvo una importante victoria en el circuito de Hockenheim en 1977,