La Yamaha XT fue sin duda un referente de las motos de los años 80. Se fabricó en numerosas versiones caracterizadas por diferentes soluciones de bastidor y diferentes motores. Todas las motos, sin embargo, estaban unidas por la clara vocación off-road/enduro. Entre los más famosos, equipado con el motor monocilíndrico más potente disponible, el XT 600 Teneré. De la moto vendida en el mercado se hizo una versión especial, la “660”, para competir con éxito en el París-Dakar y el Rally de los Faraones. Adoptó un motor más grande con una cilindrada de 634 cc, suspensión Ohlins mejorada, filtros de aceite y aire dedicados a adaptarse mejor a las condiciones climáticas y un tanque grande que caracterizó su diseño muy “musculoso” y cautivador.